Las vacas locas

Saben ustedes ese chiste de dos vacas locas que van pastando tranquilamente y una le dice a otra:

Sabes que hay una enfermedad que nos afecta y nos vuelve locas?
A lo que la otra le contesta
No se de que me hablas, yo soy un conejo….

Esa sensación de perplejidad, fue la que tuve ayer cuando me dirigía a hacerme la pedicura a un sitio nuevo localizado en la calle Barquillo. Totalmente recomendable, por otro lado.

Me encontré con los primeros manifestantes que bajaban de los autocares. Manifestantes no había muchos, pero autocares.... Todo el carril central de la Castellana cortado por aparcamiento de autocares. Si aparco mi coche en el carril central de la Castellana, la alcalda Carmena -no voy a perder la oportunidad de recordarles que NO ha sido elegida por mayoría- me entero de lo que vale un peine. Les recuerdo que, a pesar de ser mujer no soy negra, maltratada ni pertenezco a ninguna otra minoría protegida.

Pero a lo que voy: oigo a unas señoras en la Plaza de Colón, que le dicen a otras dos catalanas, que habían venido con sus maridos, que “tienen que ir a probar unos callos a la madrileña que se van a chupar los dedos” a lo que una de las independentistas dice a la otra: “hija, son encantadores”. No lo puedo evitar y me meto en la conversación: “Es que ustedes vienen a su casa, como cuando nosotros vamos allí”. Sonrisas entre todos y un “vamos a por los callos” del marido de una. Esto lo viví yo, ayer, no me lo han contado.

Saben lo que creo? Pues creo que nos conocemos poco. Deberíamos organizar manifestaciones en distintas ciudades para conocernos mejor y apreciar lo que vale este país tan denostado por los progres idiotas. Próxima mani: La Coruña. Viva España!!!

Haaasta pronto!!!