La libert'a zezuá
Irene Montero que no tiene ni pe idea de leyes pero presume de saber mucho de
sexo, ha parido un cuarto hijo: La Ley
de libertá zezuá. Oigan, 60 tacos y yo, como una idiota, no había caído en
que no era zezualmente libre. Ha tenido que venir esta insigne, cuyo mayor
mérito es abrirle las piernas a un Vicepresidente circunstancial,
para que se la beneficie, a decirme que no
era libre!!! Alguna de las sucesivas parejas que, en uso de lo que yo creía
que era mi libertad, me he beneficiado, ha sufrido una apoplejía al saber,
gracias a Irene Montero, que yo, pobriña, no era libre ni había hecho lo que me dió la realísima gana en todo
momento de mi vida, sin mas limitación que mi propio criterio y la libertad de los demás. Irene, Ministra de Igual-dá: si naces un
pelín más boba, naces botijo.
En la semana de
reivindicación de los derechos de las mujeres oprimidas que somos, y por
continuar con esta cuchipandi que ha pasado de la guardería al Gobierno, gracias a Pedro Sánchez, el lema de la
manifestación de este año es algo así como “Quiero
llegar a casa borracha y sola”. No hace falta que les diga que no voy a ir
a manifestación feminista alguna, pero ese lema… ese lema me toca los
perendengues y no me voy a callar. Me explico:
Desde chiquitita
he defendido la igualdad entre hombre y mujeres, pero creo que las nuevas, no
habéis entendido nada. Las feministas de verdad, las que peinamos canas y hemos
desarrollado puestos directivos y de responsabilidad desde que nos destetaron,
hemos luchado y luchamos por la igualdad
salarial a igualdad de responsabilidad laboral. Ahora os doy un disgusto: nos encantan los señores, obsérvese que no
he dicho hombres, no queremos ser como ellos, ni dejarles en un rincón,
sino darles la importancia que tienen en nuestras vidas, más allá de que nos
hagan hijos, a veces hasta gemelos, y defiendan las sandeces que podamos decir,
acusando de machista al que no nos jalea. Tas coscao, Irene?
Haaasta pronto!!!
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