Las monjas de Santiago
Que el mundo está al revés, lo
demuestra que haya mujeres españolas que trabajan para un partido político
financiado por Irán. Dicho eso, añado, sin que tenga relación alguna, que no tengo nada contra las monjas contemplativas, pero
creo que Dios hace mucho que dijo
que prefería una vida un poco más activa. Que, en pleno Siglo XXI (21 para los no iniciados), haya tres monjas indias
retenidas contra su voluntad en un Convento
de Santiago… supera mi capacidad imaginativa.
Son indias de la India y llevaban
aquí mas de 15 años. Se ve que, al
principio, la cosa estaba bien, les daban caldo gallego, empanada y, los
Domingos y Fiestas de guardar, Alvariño y Tarta de Santiago. Pónganle acento
musical, el propio de los gallegos. Vuelvan a leerlo, ya verán como con el
acento adecuado da hasta hambre. Bueno, pues parece que, de un tiempo a esta parte, ni
empanada, ni caldo ni nada de nada. Las Madres
Mercedarias de Santiago, nombre del convento, que, por cierto, acongoja un
poco, las tenían retenidas y no había forma humana de que las dejaran marchar: que
si no tienes permiso de residencia, que si lo tiene que autorizar el papa…
Oigan que no había forma.
Ha tenido que ser un Juez, tras una denuncia anónima, el que
de la orden para que se puedan ir. Los
jefes del Convento, como suele pasar
con los jefes, no se habían coscao de nada. Ole!
Haaasta pronto!
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