El dedo acusador

Pablo Iglesias tiene un ceño abrumador. Cuando habla estira el dedo índice –el iinndice, no el corazón- y lo tuerce como si lo colocara en lo que vendría a ser decúbito supino de dedo índice. El dedo así, junto con el ceño ese que pone como si estuviera a puntito de dar un reventón, no le favorece nada. Es más, le ves en ese momento, cualquier día en el Congreso porque no sabe hablar de otra forma, y te dan ganas de llamar al 112 a ver si se lo llevan antes de que la cosa acabe en  tragedia o a la iglesia mas cercana pidiendo un exorcista.

Por que inauguro así? Debo confesar que no lo sé. No se si es que me apetece dejar constancia del hecho, o que me cabrea que nadie de Podemos me haya llamado para pedirme, ordenarme, amedrentarme o amenazarme por hablar mal de ellos. Y me siento discriminada, que quieren que les diga. Claro que no soy periodista.

NO se a que viene que la Asociación de la Prensa salga a contarnos las cosas horrorosas que les hace Podemos a la vez que mira para otro lado cuando han insultado, repito insultado a otros periodistas. Si, estoy hablando de Mariló Montero, tan periodista como los que hoy se lamen las heridas y nadie le hizo el menor caso, salvo para reirse de ella.

Haaasta pronto!!!