Las clases de conducir
Yo aprendí a
conducir cuando cumplí 18 años, y las clases me llevaban exactamente una hora y
diez minutos. Una hora de clase, cinco para subir a la academia y cinco para
bajar a casa.
Pues el Juez de Vigilancia Penitenciaria José Luis
Castro, le da a Idoia López Riaño,
20 veces asesina de ETA, 8 horas 8,
para hacer lo mismo que los demás hacemos en 1 hora 10 minutos. Y a nadie se le cae la cara de vergüenza, ni hay Juez alguno que le mire la ejemplaridad a estos permisos a asesinos convictos. Ah, que son de ETA!! Que con la ETA hemos topado!!
Dice el Juez
que esta asesina ha realizado “múltiples
actividades formativas” dentro del centro, con “notas meritorias” y un “perfecto
andamiaje en su comportamiento”. Estoy segura de que a ustedes también se
les ocurren las materias en las que esta pedorra ha prosperado y no es
necesario que yo las describa aquí.
Buenas y
tristes noches!!
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