Frase del día: “Un ladrón es un financista impaciente.” Rafael Barret (1876-1910).
Escritor y periodista español, desarrolló la mayor parte de su carrera en
Paraguay. Atención a la frase que vamos de sindicatos.
Todos
los diarios recogen la noticia del asalto a un Carrefour de Sevilla por el Sindicato
Andaluz de Trabajadores encabezados por Diego Cañamero. El sindicato está considerando el cambio de nombre,
del actual a “Sindicato Andaluz de
Asaltantes de Caminos, Canales y Puertos”, denominación que se ajusta mucho
más a su verdadera actividad.
Ayer se
llevaron 10 carritos 10 de material
escolar. No hay que asustarse, solamente estamos ante otro sindicato andaluz
que choriza, unos por la vía de la factura amañada (que me cambies el
concepto, hombre, para que me lo pague la Junta!!) y otros por la via del trinca y corre, como estos.
La hipocresía
llega muy alto. El tal Cañamero dice
que: “no son robos ni hurtos porque lo
hicimos con los medios de comunicación delante.” Y que “expropian material escolar para después
repartirlo a familias que lo necesiten”. La primera afirmación podría ser definida, con
todo acierto, como una gilimiembrez. Esto le va a encantar a mi amigo
el abogado: te pego un tiro, pero si
lo hago chupando cámara, no es delito. Hombreeee..... La segunda debe de ir por la cosa de la redistribución
de la riqueza. Ha visto muchas películas el pobre y no ha entendido
ninguna. Ole!.
Por si
ustedes piensan, como yo, que el culpable es él mismo, que es el que asalta, Cañamero achaca la culpa de su
asalto “tanto al Estado Central como
al Autonómico, uno porque no manda dinero hacia abajo y el otro porque no se
impone a los recortes y los aplica”. No ha estado tan parlanchín sobre el
dinero de los ERE o lo que gastan
sus coleguitas de UGT-A en comilonas
y otras zarandajas propias de la
derechona más rancia, pagadas por la Junta
con el dinero que mandan hacia abajo lo del Estado Central, por cierto, de la derechona más rancia.
Los carros están, según dice él mismo, ocultos en un lugar secreto por seguridad y, añado yo, se autodestruirán en cinco segundos, si se intentan abrir sin una cámara delante. Ole y Ole!!
Haaasta
pronto!