Visitantes

miércoles, 8 de octubre de 2014

El ébola feroz

Bueno, ya vamos viendo la luz en el lío que se ha formado con la Auxiliar de Enfermería infectada con ébola. El protocolo era manifiestamente mejorable como las fincas, estamos de acuerdo en eso, pero ella se lo pasó por ese sitio donde nunca se ve el sol, y disculpen la claridad de mi exposición: se tocó la cara con el guante sucio, no avisó al  médico de que podría haber estado en contacto con el virus y ni siquiera procesó que su fiebre pudiera ser algo más que un catarro, razón por la cual fue a depilarse y a extender el virus por esos mundos de dios.

Pues no se que les parece a ustedes, pero yo concluyo que la auxiliar de enfermería, que no enfermera, es, básicamente, una irresponsable, no sólo por ponerse ella en riesgo, sino por poner a los demás.

Lo de su perro Excalibur ya es otra cosa, eh? Pobre perro que pudiendo haber sido tratado con el suero de la monja Sor Paciencia, ha sido asesinado, por decisión de algún médico empeñado en cumplir con su deber, lo mismo cree el incauto que para eso cobra!. El resto del mundo lo mira todo tan perplejo como yo y comprendiendo por que algunos dicen que Africa empieza en los Pirineos.

Haaasta pronto!

No hay comentarios:

Publicar un comentario