La vuelta al cole, las madres y los menús de UGT-A

Frase del día: “Si usted quiere que sus hijos tengan los pies sobre la tierra, colóqueles alguna responsabilidad sobre los hombros” Abigail Van Buren (1918-2013). Columnista americana. 

Comenta el ABC sobre “Cuando es la madre la que no se adapta a la vuelta al cole”. Perpleja, mmmuuuy perpleja: Como le puede pasar eso a una madre después de pasar el verano con sus churumbeles, incluso si sólo es uno? Siempre he pensado que lo de la pesadilla de la vuelta al cole es una exageración para rellenar minutos de telediario.

Desde el punto de vista del crío, la bendición de dejar a mamá y sus “ponte la chaqueta” a 32 grados húmedos, sus “termina ese bocadillo” de tortilla de patata reseca, en la arena de la playa, sus “termina las judías” en pleno verano o sus “todavía no te puedes meter que estás haciendo la digestión”, después de tres horas de la comida, esa bendición es un placer que sólo llega al volver de vacaciones. Y es que una madre encima las 24 horas del día es mucha madre. Así que recuerdo la vuelta al cole como el momento en que ya no estas asilvestrado y la oportunidad de volver a sentirte una personita digna de ser tratada como tal.

Desde el punto de vista de la madre, sean sinceras por favor, aunque no me lo digan, el placer de ver salir al rey de la casa el día de la vuelta al cole sólo es comparable al día en que, todos los años, se marcha al campamento, y, según sale el autocar lleno de chavales, miras a tu marido, tu marido te mira a ti, y sonríes como diciendo: te vas a enterar, moreno, las dos semanas que nos vamos a pasar. O no? Les reto a mirar alrededor y contabilizar qué ocurre en la oficina los primeros días de campamento de los chicos: Todo el mundo llega tarde a trabajar, con la sonrisita tonta, la que no te puedes quitar, con ojeras, salen disparados a las cinco en  punto sin preguntar no vaya a ser que se queden de cuadras… aayy que tiempos aquellos!!. Total, que no me entra en la cabeza que la abnegación de una madre le lleve a no adaptarse a la tranquilidad, la organización, el silencio, aunque sólo sea por el bien de su propio ecosistema, el de la madre.

En fin, que supongo que el ABC, como el telediario, necesitaba rellenar espacios. Hombreee! Pues haber hablado de las comidas de UGT-A a cargo de una subvención de la Junta de Andalucía!. Vengo echando la cuenta de cual es el precio del menú medio al que invitan estos sindicalistas y es de 50-60 Euros el cubierto. Ole!  Miren que les gusta comer…. Y luego dicen de los de derechas, oiga!

Haaasta pronto!