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martes, 24 de junio de 2014

La vagina que come estudiantes americanos

Tubinga, Alemania. Parque frente al Instituto de Microbiología y Virología. Estudiante americano de Intercambio mirando pa Cuenca, ya entenderán por que. Alcalde de dudoso gusto que autoriza y seguramente paga, una escultura de mármol con forma de vagina que simboliza “la apertura hacia el mundo”, o eso dicen. A  mi, no se por que, me transmite todo lo contrario a una apertura. No vayan a imaginarse una vagina mas o menos de tamaño normal, no, la vagina en cuestión mide como dos metros y medio o tres.

Nadie sabe que fue lo que hizo pero metió las piernas dentro y la vagina, claro, que se va a esperar de una vagina, se las enganchó. Un ejemplo práctico de definiciones: la de ansiedad (del estudiante) y la de avidez (de la vagina). 22 personas de emergencias entre bomberos, enfermeros, personal de UVI y unos 4.000, calculados a ojo de buen cubero, de curiosos opinando. Nadie pensó en la pobre vagina que resultó violada de tan burda forma. Que ha pasado de los grupos feminoides defensores de vaginas atacadas sin permiso previo? Hombreeee… imperdonable, de todo punto imperdonable!

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