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domingo, 19 de mayo de 2013


Ahora la que no se puede tomar en serio

Un grupo de seis rumanas, que, dado que se dedican a robar, supongo están aquí sin permiso de residencia, o sea, ilegales, fue castigado por un Juez madrileño a no entrar en el Metro, porque lo tenían por una sucursal bancaria y mangaban todas las carteras, bolsos y lo que fuera que se les pusiera a tiro allí dentro.

El grupo de rumanas recurre la sentencia a la Audiencia Provincial (espero que fuera antes de la Ley de Tasas, a ver si encima de que nos roban no pagan tasas). Inciso: la Audiencia Provincial se divide en Secciones, salas y no se que más, bueno, el caso es que cada cosita que ve la Audiencia pasa por 3 magistrados 3 que son los que sentencian, omito el personal adicional, vamos que ná, el coste es un guá.

 Sigo: la Audiencia Provincial revoca la prohibición con una sentencia del tenor literal siguiente: “Es patente que se les impide el acceso a un día de transporte, esencial para un gran número de ciudadanos” y que “esas medidas cautelares restringen el derecho fundamental a la libertad de circulación”. Toma del frasco carrasco.

Superado el shock inicial, intento pensar un poco que no es fácil, pero llego a la siguiente conclusión: O sea que las rumanas tienen derecho fundamental a usar el metro pero las madrileñas no tienen derecho fundamental a que no les manguen, a saber: el abono transporte que han pagado, el DNI, la tarjeta de fidelidad del Bodybell y el poquito dinero que llevan encima para pagarse un te, porque ya no es como antes que igual te llegaba para unos zapatos divinos. Conclusión: Los malos tienen los mismos derechos que los buenos. Eso debe ser la igualdad ante la Ley.

Vamos, que entre lo que nos mangan, ejerciendo su derecho fundamental, y lo que nos gastan, por la vía de los juicios, estas  “turistas” nos salen a pelo conejo que dice una amiga mía. Oiga: póngales en la frontera.

Otra cosa es que utilizar el metro sea un derecho fundamental. Yo, por más que miro, no encuentro el derecho al transporte público en la Constitución. Me ilustren por favor. Cara de vaca viendo pasar el tren.

Haaaasta pronto!

4 comentarios:

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  2. Dicen o escriben que;
    Antes de que el Estado y el poder se desplomasen de golpe sobre sus hombros, este afable caballero fue el epítome de un estilo político despreocupado y juvenil, voluble e inconsistente, hueco y trivial, que a punto estuvo de desencuadernar la nación bajo su desenfadada apoteosis de relativismo risueño. Lo llamaban “democracia bonita “y tenía como logotipos su propio arco ciliar circunflejo y una sonrisa que llego a ser comparada con la de la Gioconda. Durante seis años largos, el zapaterismo acuno a España en una indolora melodía de despilfarro que un día se detuvo de repente ante un estrépito de escombros; el edifico del bienestar se vino abajo y sepulto bajo cascotes de furia social la quimera adolescente del optimismo antropológico.
    Sr Rubalcaba, usted que abandera la verdad, dice que es lo que tendría que hacer el Sr Rajoy, usted Sr Rubalcaba, no es mejor que cogiera a ese Presidente que destruyo ese estado del bienestar que usted tanto añora, le da usted unos azotes en el culete, ese niño que ustedes Socialistas pusieron como presidente. Ese Presidente que regalaba el dinero, si lo regalaba, ese presidente que negocio con ETA, riéndose de todos los muertos que dejo ETA por la calles de mi patria, ese presidente que retiro tropas de Irak, pues tenía que demostrar que era un pacifista de M ……, pues las mismas que retiro , las puso en Afganistán y Líbano, ese Presidente de la cara de niño con sonrisa de Gioconda tenia mientras tanto a su ministro de Defensa el Sr Bono vendiendo Armas, si ,escribo bien y digo bien, el Sr Bono vendió Armas a Venezuela, Angola, etc.
    Luego vino con la Alianza de Civilizaciones, pero recortaba derechos a los inmigrantes, pero lo más Guay de todo que nos costó una pasta, nadie sabe que es la Alianza de Civilizaciones y para qué sirve, pasta perdimos o se perdió.
    Luego la Ley de la Memoria Histórica, pero se le olvido que la Guerra Civil Española tenía dos bandos, para el solo uno, cosa del socialistas, todo mío y lo tuyo también mío, tú no tienes nada, ni muertos.

    Podríamos seguir, pero mejor no joder mas, bueno una cosita mas, Sr Rubalcaba ahora que usted está en esa zona vip-guay, que usted arregla España en dos días, que lo dudo, ya otro gran Socialista el Sr Guerra nos dijo una vez que a España no la iba a conocer “ni la madre que la pario” yo tampoco, pero ahora que está usted en ese plan de “como yo Rubalcaba perdí la elecciones y solito, llego la hora del revisionista”, pues
    Revise usted los años del zapaterismo, no hable más si lo que va a decir no es más bello que el Silencio Sr Rubalcaba.

    La erosión de la realidad le ha arado a Zapatero surcos como cicatrices en el mentón y en la frente y ha congelado un poco aquel insolente rictus de la sonrisa luminosa. El feroz repudio retrospectivo de sus partidarios le ha empujado a un plano de ponderada discreción convaleciente que matiza sus perfiles históricos con una cierta elegancia perdedora. Siempre fue un buen encajador y tal vez haya asimilado fuera del liderazgo ese sentido de la responsabilidad que le falto y brillo por su plena ausencia, que le falto como gobernante. Remansado de audacias, curado de espantos, asentado de silencios, se diría que Peter Pan ha asumido su madurez vistiéndose a la fuerza con pantalones largos. Ahora usted Sr Rubalcaba busque una buena residencia y vaya usted al retiro, no lo haga por usted, no piense en usted, no diga nada, solo por dignidad, solo por esta España que le dio de comer, calle y retírese por dignidad, ya no política, dignidad humana.

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  3. Eres el mejor con mucha diferencia tus Padres lloran de Orgullo y Honor por un Hijo como Tu, No cambies Nunca G.
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    Mi mas sincero Pesar por la Muerte de tres Hombres que Amaban SU PATRIA SU BANDERA SU EJERCITO, DESCANSE EN PAZ.

    Lo demandó el honor y obedecieron,
    lo requirió el deber y lo acataron;
    con su sangre la empresa rubricaron
    con su esfuerzo la Patria engrandecieron.
    Fueron grandes y fuertes, porque fueron
    fieles al juramento que empeñaron.
    Por eso como valientes lucharon,
    y como héroes murieron.
    Por la Patria morir fue su destino,
    querer a España su pasión eterna,
    servir en los Ejércitos su vocación y sino.
    No quisieron servir a otra Bandera,
    no quisieron andar otro camino,
    no supieron vivir de otra manera.


    ¡Oh Dios!, Padre nuestro y amigo de los hombres,
    que premias con generosidad los actos nobles de tus criaturas:
    A cuantos hicieron oblación de sus vidas en el servicio de España,
    concédeles tu amistad y el premio de la vida eterna.
    Y a nosotros, los que caminamos aún aquí en la Tierra,
    españoles de diversas creencias religiosas y concepciones de la vida,
    ayúdanos a estar unidos en la construcción de la paz y de la justicia.

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  4. Lo siento, no puedo contestar este comentario. Solamente puedo decir que lo comparto. Como creyente que soy, rezaré por ellos y sus familias.

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